Rafael Molina es un alcalaíno que ha tenido la idea de adaptar un taxi para personas con movilidad reducida. Cuenta que todo le surgió con la caída que tuvo su abuela, en la que se rompió la cadera y a raíz de ello, vio la necesidad que había en este tipo de personas para moverse y que era muy difícil subirse a un auto normal, lo mismo le pasaba a muchas personas que están en la residencia de mayores o incluso a ciudadanos que tienen algún accidente y se rompen un pie, por todo ello se decidió a montar su propio negocio, pidiendo una licencia municipal como taxi adaptado. Añade Rafael que así abría el camino a los demás y con la licencia y este trabajo podría vivir en el pueblo, pues trabajaba en Palma de Mallorca, pensando que aquí había varios taxis normales y era conveniente que hubiera uno adaptado.
Rafael manifiesta que los permisos y la autorización la solicitó y conforme la pidió, se la concedieron y no hubo ningún problema para ello. Comenzó a trabajar en la semana del mes de abril que va del día 16 al 22. Tiene experiencia en la conducción de vehículos, pues ha trabajado en Mallorca, empezando como taxista, y luego en una empresa de taxis, microbuses y autocares. En cuanto al trabajo, manifiesta que en estos primeros días se está dando a conocer y añade que va la faena va lenta y un poco floja, pero que ‘hay que darse a conocer, que la gente sepa que existe este servicio y comenzar a tener una clientela; ahora mismo el asunto no está para tirar cohetes, pero como en todos los negocios, al principio, cuesta un poco arrancar, espero que esto vaya en auge y que pueda seguir adelante, porque si el negocio no fluye mala cosa es’.
Además, cuenta que el auto es una furgoneta Citroen, Yumpi, la describe como ‘un vehículo monovolumen con cinco plazas, más una plaza más, adaptada, el coche se puede utilizar y se utiliza como un taxi normal para personas que tengan mucho equipaje, ‘porque tiene más capacidad, es un vehículo amplio, es más alto que los automóviles normales y es confortable; es un auto que puede llevar una persona con movilidad reducida y también para cualquier familia que quiera hacer un viaje, tiene un maletero amplio y aunque es adaptado no quita para que sea un taxi normal’.
En cuanto a los precios que cobra, dice que ha optado por los mismos que cobran sus compañeros taxistas alcalaínos y añade que a la persona que suba en silla de ruedas y le tenga que ayudar, le echo una mano, le cobro lo mismo, es hacerle un favor, y el viajero va con toda la seguridad y le cobro igual. El precio para ir a Granada es por kilómetros y dice que cuesta 60 euros con una hora de espera y hacer un viaje al Chare de Alcalá la Real tiene un precio de 6 euros. Rafael pide que ponga en la noticia que su vehículo vale para llevar a personas con movilidad reducida y como un taxi normal y solicita poner su número de teléfono para darse a conocer y que es el 652834132.
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